El poema se vuelve contra el poeta
Soy un poema y conozco al autor de mis letras
hombre tenso y con hombros platónicos
no por idealista
el versado en historia de la filosofía griega
sabrá a qué me refiero
el lego en tal materia
alzará los hombros
lo cual ilustra pedagógicamente tal analogía
este hombre que junta con esmero rara vez mis letras
sucumbe ante cualquier evento
que le distraiga de mi confección
ya he durado un par de horas en el escritorio
(en realidad es una estructura de lámina oxidada
con cucarachas diminutas) y no da con el final adecuado
con el tropo preciso para cerrarme el vientre
anda (disculpen que sea indiscreto
pero mi naturaleza es ante todo diáfana)
viendo revistas para adultos
y temblando como siberiano en bikini
le digo mudamente ponga final a mi encabalgamiento
sea con cacofonía o rima forzada
el muy digamos inspirado
anda aún contando los hoyitos de la licra
que cubre a la modelo eslava de la página diecisiete
señoritas / señores / jóvenes avezados en estas materias
hagan favor de poner el punto final que añoro
no me agrada esa moda de dejar las cosas en suspenso
ni ser tipificado como poema abierto
Cetrino
Mi nombre es Mingitorio
conozco penas y glorias de hombres arrogantes y bribones
de banqueros y vendedores de lentejuelas
conozco el tamaño de su miedo
y el chorro de sus vergüenzas
soy íntimo de ese ojo único que llevan de visita a mis dominios
de la corrugada bolsa donde guardan un par de globos
no oculares pero si caídos como parpados de borracho decembrino
a veces más de alguno me ha confesado
hincado y con las tripas a flor de boca
las desgracias de su matrimonio
la ingente cantidad de estrés que acumulan con su amante
con la secretaria y la almacenista de su oficina
algunos rompen en llanto
otros
más ingratos
me han golpeado y pateado
cuando se retiran
dado mi diseño ultramoderno
emito una onomatopeya digna de poema
cuajjjjjjshuuupp
Mente
bueno / ahora puede encender su grabadora / daré mi confesión
primero / soy tímido y tiemblo cuando se me acerca una mujer
no puedo evitar imaginar un probable romance
usted sabe
no voy directo a la cama
(el brillo de mis ojos no se debe a que sea libidinoso)
es decir / no le corro la tanga sin su permiso
todo comienza con un saludo
ella es la que da el primer paso / la que saluda y pregunta algo
mientras yo le contesto y me extiendo en platicarle
de qué color es mi auto
ella desliza sus uñas sobre mi corbata
la cual también tengo que imaginar
luego
aquí viene la mejor parte
un puñado de tipos se acerca violentamente a ella
y la comienzan a agredir sin causa alguna
yo cambio a modo súper saiyajin
empiezo pateando las pelotas de los agresores
para seguir con el castigo
lanzo algún tipo de genkidama
y si veo que no se derriten sus cuerpos
o que no desaparecen en ese resplandor
pues saco una pistola
(a la par me pongo lentes oscuros
como los de Arnold Schwarzenegger
cuando interpreta al Terminator)
y comienzo a dar disparos
todos con un tino endemoniado
al más necio
le descargo el arma en la boca
por haber ofendido
a la chica en cuestión
tome nota por favor
mientras la batalla se sucede
procuro que tanto mis enemigos
como la mujer a la que socorro
reparen en las venas de mis bíceps
gruesas como mangueras de bombero
al acabar con todos mis contrincantes
le tomo la mano a la mujer para salvarla
del inminente fuego
tuve la precaución de sembrar algunas
granadas de fragmentación
buuuuuuuuuuuuuummmmmmmmmmmmmmm
corremos ella y yo
usted pensará que aquí es cuando me da el primer beso
no es así
pues aún es de día
asunto terráqueo de lo más refractario a lo romántico
así que me tomo la libertad
de dar un puntapié al sol
para llamar a la luna con un chiflido
y haga de estrobo gigante
entonces es en ese instante cuando nos besamos
ella me confiesa
que soy el tipo que estaba esperando
y mi cara se ablanda
como la del príncipe encantado
me despido con otro beso ardiente
ella me ruega que no me marche así
por la cuerda de un helicóptero
y pues le informo que es inevitable
entonces
con mucha paciencia
ella se retira su hermosa tanga
sin siquiera mostrarme sus partes pudendas
y me regala ese objeto
el cual guardo con esmero
ahora ya puede apagar la grabadora
me reservo la segunda parte de la historia
soy escrupuloso
no quiero estérilmente antojar a nadie
Pedro Mena Bermúdez Ha publicado los libros: Pútrida voz (poemas 2004-2005), ICL, 2007; The City (poemas, 2009), ICL, 2010; Unheimlich (poemas 2005-2010), Fondo Editorial La Rana, 2011; 12 Voltios (Compilación del primer Encuentro Nacional de Poetas en León), ICL, Conaculta, INBA, 2013; La corbata y otros ensayos, Editorial Los otros libros, 2016; Tizne (poemas 2012-2016), ICL, 2017; Heráclito, Cinosargo Ediciones (Chile), 2017; Círculos de Agua (Compilación de poetas del estado de Guanajuato), Fondo Editorial La Rana, 2018. Ha colaborado en revistas impresas y electrónicas de México, España, Chile, Ecuador, Venezuela, Perú, Alemania y Estados Unidos.